
(Madrid)
IRRESPEKTIV es la primera exposición en España del artista de origen sudafricano Kendell Geers.
El
proyecto, coproducido conjuntamente por el DA2 de Salamanca, el SMAK de
Gante, el BALTIC CENTRE de Gateshead, el MOKA de Lyon y el MART de
Trento y Rovereto, reúne más de treinta obras sobre todo tipo de
soporte realizadas durante la última década y 2 nuevas instalaciones
que dialogan con el espacio de la antigua cárcel del DA2.Hace
unos años, en lo que constituye uno de sus "trabajos" mas conocidos,
Kendell Geers decidió cambiar su fecha de nacimiento real por la de
Mayo del 68. Este gesto supone toda una declaración de intenciones
respecto a los objetivos de su trabajo. El artista intenta mostrar con
sus obras de que modo la violencia -sea esta de orden político o
estructural- se ha instalado en nuestras vidas hasta convertirse en un
objeto de consumo al que no es ajeno el propio sistema del arte. De
hecho, Geers considera que en el arte contemporáneo en general no
existe un sistema de creencias que vaya más allá de lo material... Pero
frente al pensamiento lobotomizado de una parte importante del mundo
de la cultura el utiliza una estrategia ambivalente: una veces "mete
el dedo en la llaga" y en otras «rasca donde no pica». Para ello
emplea simultáneamente estrategias de seducción y perturbación
utilizando a través de diferentes soportes armas como la violencia, la
sexualidad, o el miedo... La obra de Kendell Geers pone a prueba los límites de
los códigos y principios morales aceptados, derribándolos y
recomenzando desde cero. A menudo hace uso del humor negro para
pervertir el orden establecido de las cosas, pidiéndole al espectador
que cuestione la construcción del mundo a través de un asalto visual
que lo implica emocionalmente en sus obras. Su estrategia de
desestabilización exige que negociemos físicamente un espacio en el que
existe una amenaza de peligro inmediato y muy real. Argumentando que nos comprendemos a través de nuestros límites,
Geers nos desorienta emocional y físicamente.
Nos obliga a reflexionar sobre nosotros mismos,
a ser conscientes de nosotros mismos en el espacio,
de nuestros límites y de nuestros sistemas de valores: su obra exige una respuesta... Para esta exposición,
que se presenta como una retrospectiva que reúne sus obras más significativas de los últimos 10 años,
ha añadido además varios trabajos nuevos,
entre las que se incluyen The Devil You Know (Lo malo conocido) y Monument to the Unknown Anarquist (Monumento
al anarquista desconocido). Esta última examina el terror urbano y la
violencia económica con una eficiencia formal basada en la reflexión
sobre la historia del arte. Por
si esto fuera poco, al ubicar estas instalaciones en el espacio
connotado de la antigua cárcel del DA2 se amplifican los contenidos
políticos de las mismas estableciendo un vibrante diálogo con la
arquitectura del museo que a buen seguro no dejara indiferente a
ningún espectador. El silencioso horror de Song of the Pig (La canción del cerdo), un pasillo formado con 60 bolsas para cadáveres que,
como si se hubiera producido una masacre,
aguardan con la boca abierta y hambrienta para ser alimentadas.
House of Spirits (La casa de los espíritus),
mística y filosófica a la vez,
está inspirada en el Timeo de Platón y en el Código atlántico de Leonardo Da Vinci.
Utilizando el tipo de letra Fraktur,
con su fuerte carga política,
el mural PostPopFuck 31 oscila entre la afirmación y la negación de la vida.
En última instancia,
la exposición nos urge a enfrentarnos a nuestra naturaleza,
a la realidad de nuestra muerte y a la fragilidad de nuestra existencia.
Algunas piezas clave de la exposición,
como las que se realizan con letras de neón y relojes digitales,
abordan la expresión de la violencia utilizando el lenguaje verbal.
Pero el mayor reto para Geers es superar el lenguaje como estructura que limita lo que puede ser expresado.
Geers se centra en el momento en el que nos enfrentamos a la experiencia que se sitúa más allá de las palabras,
y la emoción que arrebata al lenguaje el poder de controlarnos. Conviene recordar al respecto que en algún momento de su carrera Kendell Geers se ha autodefinido como un artista Punk,
casi en los mismos términos en que Greil Marcus sitúa en su libro Lipstick Traces
a ciertos artistas de todas las épocas cuyo trabajo es tan intenso y
efímero como una mancha de carmín: "cuyo rastro deja una huella
indeleble en nuestro corazón y nuestra memoria". La
obra de Kendell Geers aspira a purgar todos los mecanismos de control
con una explosión de energía dirigida contra la implosión del lenguaje.
Su obra es en suma el espacio donde el lenguaje y los sistemas de valor
adquieren entidad física.
KENDELL GEERS IRRESPEKTIV
DA2. Salamanca 27 de junio - 24 de agosto de 2008 DOMUS ARTIUM 2002 Avenida de la Aldehuela s/n 37003 Salamanca www.blogs.ya.com/da2salamanca |