MARZO.
Y SOY OTRA
Esta
tarde serena,
iluminada
claridad que Marzo nos revierte,
me
trae a la memoria mi soledad de antaño
y aún
me cuesta creer que fuese algo tan mío,
tan
sustancial y mío.
Porque
el hombre está solo, sólo cuando se ahoga
y no
encuentra asidero y la muerte no llega.
Así,
pasaron días
de
pájaros sufriendo la derrota
y de
tristeza inútil que lágrimas acunan.
Ahora
es sólo un recuerdo que arropo entre mi carne
y en
mi dulce vigilia descansa la locura,
y sé
que no es tan tarde para quemar las huellas
o
dejarlas sonriendo, porque ya se han llenado
de la
arena y la cal que el tiempo modifica.
Y soy
otra.
No lo
dudéis, miradme,
¿no
veis que mis pedazos han resistido al fuego
y mis
ojos denuncian
que
estoy acompañada porque el Amor me habita?
(c)Isabel
Díez Serrano
sobre la autora: ver espacio de autor
imagen: fotografía Parque en otoño- crédito Araceli Otamendi
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