Entrevista
a Marta Díaz Directora
de la Feria Internacional
del libro de Buenos Aires por Araceli Otamendi
(Buenos Aires) Araceli Otamendi
Desde
que se inició la Feria, Marta Díaz trabaja en
su organización, donde desde hace varios años es la Directora. La entrevisté
nuevamente para Archivos del Sur.
Acerca
de las novedades para este año, Feria Nro. 34 - Marta
Díaz responde:
Va
a tener la misma superficie que es la máxima que nos permite el predio de la Rural, 45.000 metros
cuadrados, que ya es una superficie importante. Hemos
tratado de poner todo en los pabellones, pero lamentablemente estamos en la
obligación de construir dos carpas y una tercera que está pendiente, porque la
superficie no nos alcanza para las salas de actos. Entonces dos salas van a ir
en carpas, son la Jorge Luis
Borges y la Juana Manuela
Gorriti. La cantidad de salas hasta este momento es la misma del año pasado.
Tal vez la capacidad en algunas salas sea mayor. Estamos justamente
distribuyendo los actos según los pedidos que hacen los expositores, las
embajadas, las provincias, distintas instituciones educativas. Hasta el momento
no tengo muy claro cuántos actos se van a hacer, supongo que será la misma cantidad
que el año pasado, que fueron aproximadamente 1.200 actos.
Tenemos organizada toda la parte de
educación, se ha agregado
un ciclo dedicado a la enseñanza de las matemáticas.
¿Cómo
será este ciclo?
Lo
inaugura Adrián Paenza y tiene mesas redondas. Además casi todas las
actividades de educación son participativas, es decir que además de las
conferencias magistrales o mesas redondas va a haber talleres. Esto es por un
pedido, porque la gente quiere participar. En principio, no sé si todas pero
por lo menos hay cinco actividades que sí tienen participación. También vienen
especialistas del exterior para algunos de los temas.
Dentro
de las actividades distintas vamos a organizar un ciclo que se llama Placeres y
sabores.
¿De
qué se trata este ciclo?
Es
un ciclo dedicado a los libros de gastronomía pero con la participación de los
autores que cocinarán a la vista del público.
Las
editoriales que se han inscripto traen a su cocinero autor y éste cocina como
si estuviera en un programa de televisión la receta sacada de uno de los
libros. Nuestro objetivo es la difusión de los libros de cocina que desde hace
tiempo están entre los temas más
requeridos por el público. Esto no ocurre solamente aquí. En otras ferias del
exterior, por ejemplo la de Book of América en Estados Unidos se hacen también
actividades gastronómicas. Hay mucha demanda de libros de cocina, no solamente
con las recetas tradicionales sino libros dedicados a la salud donde los platos
y las comidas tienen un papel relevante. Por ejemplo las recetas para celíacos,
para cardíacos y otros.
Hay
mucho material y muy interesante, cada vez la presentación es mejor.
Las
bibliotecas
Otra
novedad son las bibliotecas. Hay una parte del servicio que hemos hecho en años
anteriores. Se trata de mostrar libros agrupados en temas de educación, en las
novedades del año anterior, libros dedicados a los jóvenes y libros dedicados a
los chicos. En realidad lo nuevo son los libros dedicados a los adolescentes.
La novedad es que no es solamente la exhibición de libros agrupados
temáticamente y por editorial y todos los ordenamientos que tiene cada tema
sino también lo vamos a hacer en forma digital. Esto se completa con un portal
especial donde la gente va a poder ingresar y se encontrará con una descripción
del libro, el autor, la editorial y en algunos casos las tapas de los libros.
Este es un servicio dedicado a los profesionales del libro pero también al
público en general.
Maratón
de temas humorísticos
También
va a haber una maratón dedicado a temas humorísticos de la literatura argentina
y como este año la feria no está en el Día mundial del Libro y del derecho de
autor va a hacerse el lunes 28 de abril.
Maratón
yupanquiano
Otra
de las novedades es una maratón dedicado íntegramente a Atahualpa Yupanqui y
que va a incluir la actuación de coros de muchas provincias que tienen dentro
de su repertorio una cantidad de canciones de Atahualpa y también van a participar solistas y va a
haber un recital de poesía de parte de la obra de Atahualpa.
La
noche de la ciudad
Vamos
a repetir la experiencia del año pasado, la noche en que la Feria está abierta hasta las
dos de la mañana y desde las 9 de la noche es con ingreso gratuito al público.
Estamos armando este trabajo. El año pasado la convocatoria tuvo un éxito muy
grande. En la primera media hora, se agotaron los talones para obtener
descuento en la compra de libros.
Nos
interesa este público, que habitualmente no viene a la feria por algún motivo,
y tiene así la posibilidad de ingresar gratuitamente.
¿Este
año inaugura la feria Ricardo Piglia?
Sí.
¿Cuál
es el lema este año?
El
espacio del lector.
¿Del
exterior, qué escritores vienen?
Tenemos
algunos nombres: de España vienen Almudena Grandes, Luis García Montero, Manuel
Vicent y Baltasar Garzón. De Francia
vienen Vassilis Alexakis y Bárbara Cassin.
De Estados Unidos viene Tom Wolfe. De Brasil viene Nélida Piñon, de Portugal
vienen muchos poetas al Festival de Poesía.
De
Italia viene Pablo Fabbri que va a participar en una mesa dedicada a Pavese, y
otro autor de espectáculos musicales, Nicoló Ammaniti. De México vienen Juan
Villoro y Ernesto Laclau. De Uruguay viene Sanguinetti y de Chile, Ricardo
Lagos.
De
Canadá vienen Naomi Klein y Mario Bunge,
el filósofo argentino radicado en ese país. Hay algunos nombres no confirmados todavía.
También viene gente del exterior que participarán en el encuentro de
profesionales. Viene un especialista en derechos de autor de Inglaterra y otro especialista en medios de
comunicación y en edición de editoriales universitarias: John Lee Thompson, especialista
también en libros electrónicos.
Yazmina
Reza todavía no está confirmado. Y vienen algunos narradores para el encuentro de narración.
Algunos
de los participantes del exterior son invitados por la Fundación, otros por las
editoriales y la fundación y otros por las embajadas.
Si
nos remontamos en el tiempo, ¿extraña algo de las primeras ferias?
Cuando
la feria empezó yo era una empleada, recién empezaba a trabajar, no tenía
demasiada experiencia. Creo que ni siquiera el Profesor Castiglione que fue su
creador tenía experiencia y tenía como referencia la feria que se hacía en El
Retiro, en Madrid y la feria de Frankfurt, que es de profesionales.
La Feria del libro de Buenos Aires
se hizo de una forma muy especial, después fue cambiando. No extraño nada en
especial, me interesa la evolución. Me interesa mucho más cuando la feria va
innovando, va mostrando cosas nuevas y adaptándose a lo vigente. Uno no mira atrás
para decir qué bien que hacíamos algo. Tal vez hacíamos las cosas con las
limitaciones inclusive del predio que teníamos, con un predio que era muy
chico, que tuvo que ir arreglándose, poniendo carpas, había muchos
inconvenientes. Pero no se podría volver
a esa feria, porque esas ferias eran algo así como artesanales. Ahora
hay que ser muy responsable de las exigencias y de las competencias de las
ferias. Por que las competencias hacen la necesidad, porque las ferias están al servicio no sólo
del público sino fundamentalmente también de los profesionales, de la industria
editorial. Tenemos nuestras limitaciones, no se puede hacer todo lo que uno
desearía.
Hay
limitaciones físicas y económicas. Cuando se invita a gente del exterior, por
ejemplo, los costos de los hoteles han subido muchísimo, y esto también
influye, como los costos de los pasajes. Nosotros no podemos aumentar mucho el
valor del precio de los lotes y los ingresos provienen de la venta de los lotes a los expositores.
Tampoco podemos aumentar mucho la entrada porque la entrada tiene que ver con
el público y finalmente los sponsors a veces no se consiguen, porque los
acontecimientos culturales no son tan propicias como los hechos más masivos de
tipo popular. La feria nuestra es masiva pero es difícil hacer cambiar algunas
mentes. Tenemos auspiciantes que no son muy fieles, tenemos empresas que nos acompañan desde hace muchos
años y agradecemos muchísimo pero a veces hay necesidad de tener más auspiciantes.
Creo
que no hay aquí una cultura del auspicio justamente para lo cultural.
La Feria es un lugar donde la
presencia publicitaria es muy fuerte, más de un millón de personas que vienen y
ven los avisos de los auspiciantes pero aún así parece que lo conciben como un
ghetto, cuando no es así. A la feria va gente que nunca concurre a librerías,
por ejemplo. Hemos hecho encuestas y sabemos que hay gente que solamente compra
libros en la feria y no en las librerías.
La
feria también es un paseo.
Nosotros
pretendemos cada año dar una mayor atención, pensamos que esto es fundamental,
el público se ha hecho exigente y esto es bueno porque nosotros hemos fomentado
esa exigencia, por este tema, para que la feria sea considerada
internacionalmente como una de las mejores.
¿Cuál
es su visión de las otras ferias internacionales que visita?
Viajo
a dos o tres ferias por año. El año pasado fui a la de BEA – Book Expo América
- de Estados Unidos, fui a Liber – Madrid - y fui a la de Frankfurt.
En
general voy a ferias donde uno puede aprender, a mi me gusta mucho la de BEA
porque es una feria tipo show, no es tan profesional como la de Frankfurt, o
como la de Bolonia. La de Estados Unidos es una feria en donde se agasaja a los
libreros y a los bibliotecarios. Los editores hacen la presentación de sus
novedades, y hay una especie de presentación acompañada de regalos, una
exhibición tipo show , son muy creativos.
En
cambio Frankfurt es muy profesional, a simple vista no se ven grandes cambios.
La necesidad de estar en la feria está relacionada con el negocio de la
competencia. Los negocios ahora en Frankfurt no se hacen en la misma feria como
antes, se hacen por Internet pero en la Feria se ven los títulos que tienen las
editoriales, se ven cómo se presentan y los cambios que hacen a la industria
editorial, son siete mil expositores. Es una feria muy cortita en el tiempo.
Se
ve entonces en la Feria
de Frankfurt el hecho consumado …
Sí,
y también se ve cómo el tema de los e.book sigue adelante, qué va a ser del
futuro del libro. Hay muchos cambios y son muy vertiginosos, hay que ir viendo
cómo son. La industria editorial tiene algo fijo, el soporte papel al que se le
agregan los soportes digitales. Hay que estar muy actualizado, a veces las
cosas se anuncian con bombos y platillos, hace mucho tiempo que se hablaba de
los e-books y no ha podido concretarse tal como se venía prediciendo. La gente
sigue prefiriendo leer en soporte papel y también por otro lado los costos de
los e.books son altos.
Como
decía Bradbury:el libro es como la mujer de uno que se puede abrazar en la
cama. La computadora es algo distante.
Leer
un libro entero en la computadora cansa la vista...
El
placer de leer un libro en papel es distinto. A quienes nos gusta leer libros,
pasar las hojas, volver atrás para releer, ubicar algo que lo hizo a uno estallar
emocionalmente, eso es el placer que da el libro tradicional y que no lo da el libro
electrónico.
Balance
Es
difícil crecer en una feria, se crece cuando se tienen expositores. Gracias a
Dios la feria tiene muchos e incluso tiene lista de espera pero es difícil
innovar, presentar año tras año situaciones que sean novedosas. Todo está ya
como más o menos inventado. Depende mucho de estar actualizado y ver cuánto se
le puede dar al público tradicional o al público integrado por estas nuevas
generaciones que son las que más cuesta atraer e integrar a la feria. Cuesta porque hay que llegar con
cosas que son tal vez para un segmento muy reducido. Pero hay que estar
actualizado con los blogs, por ejemplo y con todas las cosas que los jóvenes manejan y
captan tan rápidamente. Uno tiene que adaptarse y seguir el tren a las nuevas
generaciones, pero por otro lado no perder de vista a los lectores
tradicionales, que valoran el contacto con el escritor, la firma de los
ejemplares por el autor, son cosas que ahora aparentemente no deberían existir,
porque por ejemplo al escritor uno lo ve por televisión, pero sigue habiendo
gente que busca eso. También, por ejemplo, en los temas de las mesas redondas,
uno tiene que pensar que hay que traer a
un autor que se ha hecho conocido por la televisión, o a un comunicador que es
famoso por la televisión y también hay que presentar temas que son incluso
relacionados con lo que ha pasado y siguen siendo importantes, temas incluso
académicos, temas que tienen que ver con el uso del lenguaje, con la Historia. Uno puede pensar que
esto es para una élite, pero no es así, son las cosas que también nos reclaman
y tenemos la obligación de producir. También hay que brindar cursos y talleres,
narraciones, es decir que hay cosas que están dentro del encuentro de la feria,
cosas que no se pueden cambiar. (c) Araceli Otamendi- Archivos del Sur
más información sobre la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires www.el-libro.org.ar
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