Hormiga borgeana
Sueño, laberinto, nulo, verdadero,
De la Tierra que devora la Quimera:
Misógino, Dios que hiedra primavera;
Vida gélida, hoy, Caín de Durero.
Hombre que extravía vida, inusual,
Corazón que es raza entre séquito.
-Yo, no soy ave, azul, porque irrito-
Natural, Aníbal, de religión dúal.
Hormiga que todo, borgeana, mira
Realeza aparecida del corso.
Poesía: Médica, pero de ira
Mortal, autonomía, de la batalla.
Selva: Luz desértica del Universo;
Como Dios, polimórfico y canalla.
Ley de Sicán
El sol persiste
con su nombre quieto
en lo antigüo del día.
Cecilia Bustamante
Flor, Pachacámac, de la tarde
Dame libertad, horizonte
Eviterno. Prístinamente
Ñusta de piélago que arde.
Alcázar, panaca, abrupta
Maquinaria que arma Sipán.
Ódiame por ser ley de Sicán:
Amar caos, Cao, corrupta
Capital vieja, pero, moza
Refracción de vasta belleza.
Volcán, buceador del amar,
Copiador, rojo, de perdición:
Cual primate, Hacedor del mar;
El díscolo por humillación.