Mediante el proyecto "Futuro", que comenzó hace casi un año, Fundación Telefónica ya dotó de aulas informáticas a catorce centros en los países en los que está presente -Argentina, Brasil, Chile, España, Marruecos, México y Perú-, desarrolló materiales pedagógicos y capacitó a los educadores que se ocupan de la formación de los niños.
"Futuro" reúne a más de 300 niños y adolescentes de siete países con edades que oscilan entre los seis y los 20 años, todos ellos en situación de riesgo o vulnerabilidad, que acuden a entidades que cubren sus primeras necesidades y facilitan su propia formación.
El programa se desarrolla a través de una red virtual en tres idiomas (español, francés y portugués) que unió a todos los centros participantes y que posibilita el intercambio de experiencias entre los educadores y los alumnos de distintos países. Así, "Futuro" combina la educación presencial en los centros con el uso de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, de manera que los participantes puedan trabajar de forma conjunta mediante Internet.
En el edificio de la Fundación Telefónica, en Buenos Aires, estaban presentes niños y niñas participantes del proyecto junto con representantes de dos asociaciones de reconocida trayectoria: la Fundación de Organización Comunitaria (FOC) y la Fundación Defensores del Chaco, ambas ubicadas en Gran Buenos Aires. Entre los dos centros, cuentan con dos educadores para "Futuro" y 50 niños y jóvenes cuya edad media es de 11 años, que pertenecen a familias humildes y a los barrios más desfavorecidos del área metropolitana.
La Fundación Telefónica contribuyó, en la Argentina, con la instalación en cada centro de un aula informática equipada con diez computadoras multimedia de última generación, conectadas en red y con salida a Internet. Las computadoras están equipadas con procesadores Intel Pentium 4 de 2,8 GHz, 256 MB de memoria RAM, 40 Gigabytes de memoria en disco rígido, lectoras de CD y DVD, parlantes, teclado y mouse. Asimismo, la Fundación Telefónica donó, por un año, los costos del servicio técnico y de mantenimiento para ambos centros.
Durante la videoconferencia que enlazó ciudades tan distantes entre sí como Madrid, Barcelona, Marruecos, Santiago de Chile y San Pablo los niños participantes contaban sus experiencias con las nuevas tecnologías. Los más desinhibidos hablaban con soltura y decían que les gustaba haber aprendido a utilizar una computadora y comunicarse a través de internet con sus pares en otros países. En Buenos Aires fueron los representantes de las asociaciones Fundación de Organización Comunitaria y la Fundación Defensores del Chaco - participantes del proyecto Futuro - quienes hablaron. Destacaron que hay que romper los ejes de automarginación que crea como estigma la pobreza y esto se hace a través de la tecnología, de la protección de la salud entre otras cosas. Este proyecto abre nuevas posibilidades, permite unir brechas. En la Argentina estamos bregando por la igualdad de oportunidades, dijeron.
Desde Brasil destacaron que es el cuarto país con más desigualdades en el mundo y también la problemática de gran cantidad de embarazos en adolescentes.
Los niños brasileros, expresaron las dificultades para comunicarse con otros niños por causa del idioma, lo que no había ocurrido con sus pares de Barcelona. Desde Marruecos se destacó que el eje de la salud es fundamental. Y desde Chile comentaron la buena reacción de los chicos, el entusiasmo de tener acceso a internet y poder investigar.
Es de esperar que otras empresas imiten este tipo de emprendimientos y que todos los niños puedan acceder a las nuevas tecnologías de la información . También es de esperar que se terminen las denominaciones niños carenciados, chicos pobres y ese tipo de adjetivos y que todos, niños y adultos puedan acceder, además de a lo necesario para subsistir: trabajo, comida, vivienda, salud también a los bienes culturales y a las nuevas tecnologías.
(c) Araceli Otamendi