La novela ganadora del Premio Alfaguara, la historia secreta que sólo la literatura puede contar.
En el ensayo La verdad de las mentiras Mario Vargas Llosa se ocupa de dilucidar verdades o realidades insertas de muchas de las ficciones de los autores más destacados del siglo XX. En el mismo ensayo, a manera de prólogo, dice Vargas Llosa que la vida real, la vida verdadera nunca ha sido ni será bastante para colmar los deseos humanos. También en el mismo ensayo, el escritor peruano dice que las novelas mienten ya que no pueden hacer otra cosa pero que mintiendo expresan una curiosa verdad, que sólo puede expresarse en forma disimulada y encubierta y agrega también que lo que somos como individuos y lo que quisimos ser y no pudimos serlo de verdad y debimos serlo fantaseando e inventando, es decir nuestra historia secreta- sólo la literatura lo sabe contar. Este es el caso de la novela ganadora del Premio Alfaguara 2002, El vuelo de la reina, de Tomás Eloy Martínez. Se trata de la historia de un hombre que ejerce el poder de la prensa. Camargo es el director de un diario . A medida que transcurre la novela se va develando el personaje y el mundo al que pertenece. Las mujeres, el desamor, el poder, el concepto de realidad, el pasado, la muerte, son algunos de los temas que pasan a través de los pensamientos del protagonista. Pero como en la vida no todo es razón sino que también existen las pasiones se produce el encuentro de Camargo con Reina, una mujer mucho más joven. El protagonista se aparta así por un tiempo del encuentro tal vez más importante: el del personaje consigo mismo.
Con estilo cuidado, Tomás Eloy Martínez logra una novela que se lee desde el principio al fin con el mismo interés.