Este libro analiza los problemas teóricos y didácticos que plantea la integración de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, tanto en los modos de leer y escribir, como en la adquisición de conocimientos. Con este propósito, el autor estudia las mutaciones que -a través de la historia- han ido sufriendo las formas predominantes de comunicación al tiempo que surgían nuevas tecnologías para el tratamiento de la información. Por supuesto que no se trata de un acercamiento escéptico ni utópico, sino reflexivo y crítico, que nos permitirá visualizar qué tienen que decir las revoluciones culturales en la historia de la escritura sobre nuestros modos de leer y de escribir, sobre nuestros modos de aprender y sobre el pasado que heredamos y el futuro que avistamos.