Las empresas de telecomunicación necesitan una red capilar que les permita llegar al usuario final. Su construcción requiere la realización de obras que comportan la utilización del dominio público y del privado. La existencia en la práctica de numerosos obstáculos al despliegue de estas redes de infraestructuras está dificultando la existencia de una verdadera competencia en los mercados. En este documento se analiza esta problemática aportando elementos de reflexión y propuestas concretas.