CAPACITACIÓN A DOCENTES EN EL DESARROLLO DE POTENCIALES: UNA ESTRATEGIA PARA ELEVAR LA CALIDAD DE LA EDUCACIÓN.

 

Miguel Ángel Casillas*

 

Una de las metas de la Secretaría de Educación es elevar la calidad de la educación que se imparte en todos los niveles que la conforman; se diseñan estrategias que apuntan en esta dirección, y una en particular que tocaremos en este documento es la referida a la formación de docentes, considerada como uno de los puntos que más pueden sumar para lograr esta meta. Por cuestiones de interés particular hablaremos de la formación de docentes que fomentan el desarrollo de potenciales en la población escolar, entrando en terrenos de la educación especial y, concretamente, en las acciones que se están llevando a cabo en el área del desarrollo de la capacidad sobresaliente.

 La importancia de esta temática radica en que los productos de la formación de docentes orientada hacia el desarrollo de potenciales no son solo aplicables al área de los niños sobresalientes, correspondiente a la educación especial, sino que además se ha podido comprobar que las metodologías empleadas para el desarrollo de habilidades del pensamiento y del desarrollo de potenciales pueden beneficiar a la población regular que asiste a todas las escuelas.

De acuerdo con Casillas (1995), todos los sujetos tienen posibilidades reales de identificar y desarrollar potenciales a cualquier edad, y lo que se requiere es transformar los espacios educativos en donde se pueda apreciar la preocupación del docente por ofrecer una oportunidad específica para identificar intereses y fortalezas de todos y cada uno de sus alumnos de manera cotidiana; esto sólo se logra si el docente tiene las herramientas metodológicas para transformar su práctica considerando esta visión. Es importante contemplar esta acción —de identificar y desarrollar potenciales— dentro de la currícula regular, para no crear sistemas paralelos en donde existan riesgos de segregación, elitismo y cansancio de los niños; es necesario aprovechar estos tiempos dedicados en la escuela a la formación sociocultural, tocando el desarrollo de una serie de habilidades para pensar de una manera más eficiente y eficaz; esto es una necesidad de todas las sociedades contemporáneas que buscan en la educación el soporte de sus expectativas de crecimiento.

Ofertas cotidianas de formación

En su libro, Alonso y Benito (1996) hablan de varias propuestas que se ofrecen de manera constante en diversos países, haciendo énfasis en que el éxito de un programa se debe en gran parte a la preparación del profesorado que lo lleva a cabo. Se establece que en aquellos lugares en donde existe más preocupación por trabajar buscando identificar y desarrollar potenciales es donde hay mejores programas de capacitación para los docentes participantes.

 En el extranjero es común encontrar, en casi todas las universidades, equipos de especialistas dedicados a impartir cursos, talleres, diplomados, especialidades, maestrías y hasta doctorados con esta orientación. Encontramos en la Universidad de Connecticut, en Storr las ofertas del doctor Renzulli, en las que se busca formar a los docentes sobre un marco conceptual y metodológico desarrollado por su equipo para la identificación y atención de los niños sobresalientes, y la orientación más interesante es que se pretende que esta metodología se aplique en toda la población escolar para elevar sus niveles de desarrollo de las habilidades que toca dicho programa.

 Algo similar están trabajando el doctor Treffinger y el doctor Feldhusen en Sarasota, Florida, focalizada su labor hacia el estudio y desarrollo de la creatividad, que es un tipo de pensamiento que encierra una serie de habilidades y procesos de pensamiento muy interesantes, como la fluidez, la flexibilidad, la asociación de ideas, la originalidad, el juicio diferido, la elaboración, entre otras, que desafortunadamente se cultivan poco en los niveles posteriores a la educación preescolar. Los avances de la ciencia tienen siempre el matiz del pensamiento creativo, que es lo que caracteriza a individuos y sociedades que buscan estar a la vanguardia en las diferentes tareas productivas.

 Sobre la creatividad tenemos el Master Internacional de Creatividad, como espacio en la formación para el desarrollo de este potencial humano; uno de los autores que promueve este trabajo es el doctor Saturnino de la Torre, de España, que en conjunto con el doctor David Vivas, en Venezuela, están conformando la red internacional de creatividad, que tiene como finalidad estructurar eventos y trabajos de formación, investigación y difusión de esta temática tan sobresaliente en la tarea de optimizar el potencial humano.

 Uno de los trabajos más serios e interesantes en este campo es el que realiza el doctor Feuerstein, en Israel, con su Programa de Enriquecimiento Instrumental, donde se parte del principio de la modificabilidad cognosctiva y de la teoría del aprendizaje mediado como soportes para alcanzar niveles de funcionamiento óptimos en la población a la que se aplica el programa. Como oferta de formación o capacitación para el docente es difícil considerarla viable porque los cursos de entrenamiento no se ofertan cerca de nuestro estado, es necesario desplazarse a Estados Unidos para obtenerlos.

 En España, uno de los centros que mas seriamente está trabajando para encontrar mejores formas de desarrollar potenciales es el Centro Educativo Huerta del Rey, en Valladolid, orientado hacia la identificación y atención de niños superdotados. Ofrece una serie de estrategias de capacitación y actualización que buscan que los docentes se conviertan en verdaderos investigadores y diseñadores de programas que desarrollen los potenciales de sus alumnos (Ideacción, 1997).

 En la ciudad de México, en la Universidad de las Américas, se encuentra trabajando la doctora Janet Saenz, quien ofrece espacios para la capacitación de personal interesado en el campo de atención a los niños sobresalientes o superdotados; tiene un marco conceptual y metodológico actualizado y utiliza el paradigma dominante en esta área que, como lo mencionamos en líneas anteriores, está orientado a ofrecer estos beneficios a la población escolar en general.

 En nuestro estado existen algunas instituciones que ofrecen espacios de formación, actualización y capacitación orientados a docentes que quieren incidir sobre el desarrollo del pensamiento, y regularmente tienen como marco la psicología cognoscitivista, en donde se busca estudiar lo que ocurre en los procesos cognoscitivos (y afectivos), básicamente en el procesamiento de la información, para establecer situaciones de intervención docente a fin de enriquecer/profundizar la evolución de dichos procesos.

 Un programa de formación que utiliza parte de los soportes teórico-metodológicos de Feuerstein, además de los aportes de Sternberg, Gallimore y Rogoff, es la Especialidad en Educación Cognoscitiva que oferta el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), siendo esta propuesta una de las más serias que se pueden encontrar en nuestro estado y que, además, tiene la orientación de desarrollar los potenciales cognoscitivos de los educandos a partir de la formación de docentes en una línea de trabajo teórico-práctica con un enfoque esencialmente cognoscitivista desde las perspectivas vygotskiana y neovygotskiana como marco epistemológico.

 El programa de filosofía para niños es otra alternativa para desarrollar el pensamiento crítico en los individuos; en Guadalajara existen personas que ofrecen cursos para el manejo de esta metodología propuesta y diseñada por el doctor Matew Lipman, que permite que los niños puedan introducirse al complejo mundo de las reflexiones, utilizando procesos cognoscitivos y afectivos que generan el desarrollo de herramientas cognoscitivas necesarias para la elaboración adecuada de juicios críticos y la toma de decisiones.

  En lo particular, el equipo de CAS-Preescolar ha trabajado en la Universidad Autónoma de Guadalajara en los diversos espacios que tienen para la actualización para docentes, con una serie de cursos orientados a desarrollar potenciales dentro del aula regular; en estos momentos estamos ofertando, a docentes de la Secretaría de Educación del nivel de Educación Primaria Estatal, cursos para identificar y desarrollar talentos utilizando el curriculum regular como base.

 Se está trabajando, desde 1992, un programa de capacitación para el personal que labora en este proyecto, y se tienen dos etapas al año:

· La etapa intensiva se trabaja al inicio y al final del ciclo escolar, utilizando la primera y la última semanas de trabajo del calendario escolar y citando a los especialistas de CAS-Preescolar a participar en sesiones completas correspondientes a su horario de trabajo. Además es importante mencionar que, cuando existe personal de nuevo ingreso, se tiene diseñado un programa de capacitación intensivo con una duración de tres semanas, aproximadamente, en donde se les proporcionan los elementos indispensables para que puedan iniciar su tarea.
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· La segunda etapa es la de capacitación continua; ésta se trabaja en sesiones mensuales a lo largo del año escolar, y tiene como finalidad capacitar al personal que ya está en servicio para trabajar con la visión del desarrollo de potenciales y casi siempre se realiza a manera de taller.
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Podríamos seguir enumerando los esfuerzos aislados que se identifican en el mundo, en nuestro país y en nuestro estado, pero no es el motivo de este escrito: lo que se pretende es mostrar cómo es que se pueden dar los procesos de capacitación y actualización a docentes con esta visión, y particularmente en nuestra experiencia de capacitación en el Proyecto CAS-Preescolar, qué elementos y características hemos encontrado y por qué debemos considerar seriamente a este tipo de trabajos como una estrategia para elevar la calidad de la educación que ofrecemos a los niños de Jalisco.

Características que deben tener los docentes que fomenten el desarrollo de potenciales

Los docentes que quieren que sus estudiantes puedan aprovechar el tiempo destinado a revisar los contenidos temáticos, para desarrollar simultáneamente habilidades del pensamiento de una manera intencionada y sistemática, deben preocuparse por manifestar algunas características en sus aulas.

 El doctor Berché (1990, citado en Rayo, 1997) indica las siguientes características (la explicación es mía) que deben reunir los docentes que quieren ir más allá de la simple recitación de lecciones:

I. Conocerse a sí mismo: para estar consciente de las fortalezas que tiene como docente; además reconocer qué le hace falta dominar mejor para ofrecer estrategias de aprendizaje lo mas adecuadas a los requerimientos de sus alumnos

II. Conocer al niño: en este punto es importante mencionar que, en la medida en que conozca las características de sus alumnos, identificará de una manera natural los potenciales de cada uno de ellos y podrá llevarlos a la formación de las capacidades de una manera más enriquecida y con mayor profundidad. Es importante revisar las características grupales e individuales, ya que esto es lo que establece la diferencia entre ofrecerles algo "sin sentido" o, en el mejor de los casos, situaciones que resulten retadoras y atractivas para sus niveles de competencia e interés.

III. Avanzar con el niño: todos los individuos tienen características que los hacen únicos; sus intereses, estilos y ritmos de aprendizaje son diferentes, y es necesario que el docente pueda interactuar de acuerdo con estas consideraciones individuales; pero tiene que aprovechar las condiciones grupales para jalar y contagiar a todos sus alumnos con el avance y el entusiasmo que algunos de ellos manifiestan. Aquí este punto tiene mucho que ver con conocer y monitorear el proceso de formación de capacidades, y con la capacidad de interactuar con la evolución de este proceso para enriquecerlo y orientarlo hacia los intereses y habilidades mostradas por los alumnos.

 

IV. Permitirle trabajar individualmente en sus intereses particulares: la educación debe ofrecer espacios de trabajo para el desarrollo armónico del sujeto, pero esto no tiene que entenderse sólo para cuestiones generales: existen necesidades individuales que requieren ser atendidas en el aula, y en este tipo de cuestiones, en ocasiones, se requiere trabajar con herramientas cognoscitivas y/o afectivas específicas o, quizá, con algunas herramientas que no se trabajan de manera cotidiana en el aula y que el docente puede incorporar no sólo con la intención de atender al niño que lo está solicitando de forma abierta, sino para el beneficio de toda su clase. La solución no será la de aislar a los niños que muestran intereses particulares y diferentes a los del grupo de referencia, sino aprovechar esta situación para dinamizar la clase y para que estos niños o jóvenes puedan ser considerados como dispositivos para que otros puedan identificar sus fortalezas, y no como sujetos que alteran "el orden" de la sesión escolar.

 V. Saber que los potenciales no siempre aparecen en todas las materias: pueden existir niños con fortalezas muy particulares, incluso con algunas que no sean muy apreciadas académicamente, pues los sujetos no tienen que ser brillantes en todo para considerar la existencia de un potencial, ya que éste puede aparecer en cualquier área del desempeño humano. Lo interesante de identificar un potencial es reconocer la existencia de un interés intenso por una temática específica; pero quizás lo más interesante es identificar una serie de procesos cognoscitivos y/o afectivos que resultan atractivos por su impacto sobre la manera de apreciar la problemática que le atrae al sujeto; entran en juego una serie de condiciones que en otras circunstancias no aparecen y que le permiten al sujeto ser más productivo en la generación de ideas, o mantener la atención mayor tiempo sobre una situación específica. Robie Case (1989) menciona que el aumento en los periodos de atención hace que la efectividad de los procesos cognoscitivos se vea beneficiada enormemente; si consideramos lo dicho anteriormente, la atención se ve altamente beneficiada cuando la tarea que se realiza es del interés del sujeto y si además muestra habilidades para su realización.

VI. Fomentar y reconocer los talentos creativos: los potenciales están compuestos, básicamente, de interés profundo y de habilidad en la realización de una tarea específica; los niños creativos son inquietos, curiosos, les agrada romper con esquemas de acción preestablecidos, su potencial creativo, como todos, está a la espera de situaciones y condiciones que les permitan desarrollarse al máximo. La creatividad es un tipo de actividad intelectual que se debe fomentar en el aula, y la explotación de este potencial es lo que ha permitido a la sociedad mundial romper con los paradigmas que atan el avance de la ciencia. Muchos de nuestros alumnos tienen que enterrar sus ideas porque las condiciones y las situaciones de trabajo no son lo suficientemente flexibles como para desarrollarlas en el aula.

Características a lograr en un programa de capacitación en el desarrollo de potenciales

Algunos autores consideran ciertas características que están determinadas casi como personales o innatas en los profesores que pueden desarrollar potenciales, mientras que otros hablan de la necesidad de trabajar para lograr un perfil profesional lo más completo posible. En esta ocasión referiré a las características estudiadas en la investigación que da soporte a este escrito, que se realizó tomando como campo de indagación el programa de capacitación de CAS-Preescolar, y que son las siguientes:

 Estas características que deben tener los docentes especialistas en el desarrollo de potenciales sabemos que deben trabajarse en programas de capacitación y actualización, de ser posible como formación, en nuestras escuelas de educación básica; no debe existir el prejuicio de que esto es sólo para los docentes que trabajan en educación especial o particularmente para los docentes que trabajan en programas para el desarrollo de habilidades del pensamiento; creer esto es lo que imposibilita al docente regular incorporar herramientas metodológicas que agranden su horizonte de impacto sobre los alumnos.

 Lo más importante es considerar que es difícil encontrar especialistas que en su formación básica cuenten con todas estas características; lo más frecuente es encontrar posibilidades de transformar los perfiles profesionales mediante la capacitación, y tomar en cuenta que el enriquecimiento en el repertorio de herramientas y estrategias del docente es un camino para que su intervención pedagógica sea de mayor calidad.

 Se ha evidenciado que las características que se requieren trabajar en los docentes para que su quehacer esté orientado hacia el desarrollo de potenciales, por lo menos, tiene que ser de cuatro tipos:

· Metodológicas/informativas
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· Actitudinales
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· Experienciales
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· Personales
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Las primeras, las características metodológicas/informativas, nos hablan del conocimiento manejo y control de técnicas y estrategias psicopedagógicas para ofrecer atención profesional en el desarrollo de potenciales a la población, y están focalizadas hacia la intervención en el enriquecimiento de los procesos involucrados en la formación de las capacidades. También se considera el tener los elementos explicativos de la naturaleza del proceso de desarrollo de potenciales como el marco en el que se insertarán todas las acciones realizadas para tal cuestión.

 Es conveniente ofertar diversos espacios a fin de que todos los docentes conozcan las diferentes opciones que existen en el mercado para el desarrollo de potenciales, o por lo menos las que ya están contextualizadas por las aplicaciones y construcciones que se han hecho en nuestro estado; se tiene que crear condiciones para analizar dichas propuestas, así como generar necesidades por el conocimiento de estas estrategias metodológicas y, en la medida de las posibilidades y de los requerimientos, aplicarlas en las aulas regulares, estableciendo un programa de asesoría y seguimiento de estas experiencias.

 Las segundas características, las actitudinales, tienen que ver con la disposición que muestran los docentes para atender de forma profesional el desarrollo de potenciales. La disposición está referida a un estado afectivo, generado por el propio interés del docente por transformar su práctica, con el querer tener otras pautas para conceptualizar la práctica educativa. No sólo es sentir la necesidad de capacitarse, sino realmente creer que los niños tienen potenciales que hay que descubrir y desarrollar; existen muchos indicadores en la literatura para considerar estas características como muy importantes, aunque considero que deben tener el mismo peso que la anterior y las posteriores. Si no existe la disposición de los docentes para transformar su práctica es muy difícil impactar sus competencias profesionales.

 Establecer conciencia de que existe necesidad de convertir nuestra práctica educativa en un espacio para la identificación y desarrollo de potenciales como una forma de responder realmente a las necesidades de nuestros alumnos, sin descuidar el curriculum regular, es una meta que se trata de alcanzar con algunas actividades realizadas para sensibilizar a los docentes: se busca modificar la actitud, la disposición, por una en que se pueda apreciar el reto de ser maestro. Se requiere apreciar esta posibilidad como un reto personal a vencer, mostrarse abiertos hacia los planteamientos nuevos para su competencia y, lo mas importante, estar convencidos de que lo que aquí se está haciendo vale la pena.

 Las características experienciales son las que casi no se toman en consideración por la mayoría de los estudiosos de este campo; por ejemplo, Castanedo (1997) menciona que los docentes que atienden a los sujetos superdotados tienen que tener las mismas características que tienen los alumnos, según lo especificado por Renzulli; esto es habilidad por encima de la media, compromiso con la tarea y altos niveles de creatividad, y creo que esto no tiene que establecerse necesariamente como requisito.

 El profesional que trabaja en este campo debe experienciar los mismos procesos que quiere enriquecer en los alumnos. Si se pretende influenciar el desarrollo del pensamiento creativo y crítico, es necesario que los propios docentes desarrollen estos procesos, que en las sesiones de capacitación que se contemplan en el programa, a la vez que revisan una serie de contenidos fundamentales en el área, se fomente el desarrollo de su pensamiento crítico y creativo. Si bien no se pretende que los docentes que desarrollan potenciales sean sobresalientes, sí deben tener experiencia propia en los procesos que van a impactar de otra manera, pues de lo contrario su involucración será superficial y discursiva solamente. La experiencia es algo muy cotizado: se encuentra que algunos docentes prefieren como responsables de las sesiones de capacitación a los maestros que tienen mayor experiencia en la temática que se quiere abordar, porque pueden hablar de lo que ellos ya han visto en su práctica cotidiana y, argumentan, eso les permite emitir juicios mas fiables de la temática que se aborda.

 Se me dificultó describir la categoría de las características personales porque parecen innatas o poco susceptibles de transformación por la acción de la capacitación; creo que también éstas se desarrollan, y es por eso que las incluimos y es aquí donde entran aquellas características que se identifican como propias del individuo. Ser original, flexible, responsable, comprometido, tener buen juicio, razonamiento, ser analítico, dinámico, inquieto, entusiasta, son algunas de las características que aquí se contemplan. Se debe reconocer que transformar estas características requiere de programas mas especializados en la eficientización de los procesos cognoscitivos que intervienen en cada uno de los elementos enunciados.

 Dentro de las características de los especialistas para el desarrollo de potenciales, las personales son las que más enfatizan los autores de la bibliografía consultada; considero que tienen orientación a tomar a éstas como ejes para trabajar las restantes; pero no está claro si lo refieren como requisitos que se deba tener para entrar en un programa de desarrollo de habilidades del pensamiento, o como características que se puedan desarrollar como producto de un programa de capacitación para docentes. Parece ser que las personales y las actitudinales son las que se pudieran tener de entrada, y las otras dos serían las que se tendrían que conseguir durante el trabajo de capacitación; aunque insisto, todas son importantes en un proceso de formación o de capacitación.

Potencial y capacidad

El proceso de desarrollo de potenciales (Casillas, 1997) es un camino que se recorre en la formación de las capacidades, y aquí tendremos que conceptualizar qué entendemos por potencial y por capacidad:

El potencial es un dispositivo intelectual, conformado por habilidades e intereses que está construido incipientemente sobre bases naturales; pero desarrollado, enriquecido, fortalecido y orientado por elementos y situaciones socioculturales que se plantean en el contexto en donde se desempeña el individuo.

La capacidad es la posibilidad de interactuar efectivamente con situaciones planteadas como problemáticas, utilizando nuestras experiencias cognitivas y afectivas, operacionalizadas en el diseño de estrategias de acción ejecutiva; entendida de esta manera es el producto del Proceso de Desarrollo de Potenciales.

Si lo que se pretende es desarrollar potenciales, es necesario que el docente que oriente su quehacer hacia esta meta conozca el proceso en que se desarrollan los potenciales. Varios autores concuerdan en que el potencial está en espera de situaciones y condiciones propicias para convertirse en un capacidad, y en este sentido estamos de acuerdo con la idea de Leontiev (citado en Trujillo, 1995) al considerar que las aptitudes son el punto de partida y que las capacidades humanas son la meta de la intervención educativa; pero la formación de capacidades es cíclica, se encuentran varios niveles internos en el propio proceso que, al funcionar en un nivel superior, se repiten, sólo que con un grado de complejidad mayor.

 Cuando el docente transforma su práctica como producto de su capacitación, se puede decir que transitó por el proceso de desarrollo de potenciales, y una de las temáticas que se deben abordar con mayor fuerza es la formación de capacidades a partir de la identificación de potenciales.

Características que deben tener los espacios de formación/capacitación de docentes

La capacitación es un proceso de transformación interesante en donde el recurso esencial es la propia acción del sujeto que quiere dicha transformación. En el caso de lo que se está trabajando en CAS-Preescolar, se considera que la mejor forma de propiciar la incorporación de herramientas metodológicas en los docentes es la de trabajo en taller:

· Ya que tiene un enfoque constructivista que permite accionar directamente con los objetos de conocimiento.
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· Fomenta que el sujeto adquiera compromiso con la tarea al ser partícipe del establecimiento de alcances y limitaciones de sus propias acciones.
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· Permite que el docente, en proceso de capacitación, se responsabilice de su propio proceso de aprendizaje.
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· Establece mayor significación con los contenidos que se están revisando, ya que son determinados a partir de las necesidades detectadas.
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· Se ejercitan procesos cognoscitivos, que son el objeto de trabajo con los alumnos, por lo cual abona a la adquisición de las características experienciales.
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En este tipo de dinámica de trabajo existen trampas que es necesario identificar, como el innecesario autoritarismo que pueden mostrar los coordinadores de las sesiones de capacitación; no hay que olvidar que existen dos focos que hay que atacar simultáneamente: el análisis de los contenidos de capacitación y el ejercicio de las habilidades del pensamiento de los docentes para que puedan experienciar los procesos que quieren impactar en los alumnos.

Elevar la calidad de la educación

Se puede hablar de que elevar la calidad de la educación es el producto de un proceso de transformación de nuestra forma de percibir el hecho educativo y de la manera en que lo realizamos, y la capacitación es una estrategia indispensable para lograr este propósito.

 Una práctica docente más enriquecida, con mayores opciones para los alumnos, con herramientas de trabajo más variadas y mejor sustentadas, es una práctica de calidad. Cuando se busca llegar a las necesidades específicas, y no sólo a las generales, estamos ofreciendo una verdadera oportunidad de desarrollo para los alumnos, trabajar con la visión de conocer y atender sus posibilidades de crecimiento responde a la idea que nosotros tenemos de calidad en la educación.

Beneficios para todos los alumnos

El impacto que tiene un docente capacitado en el desarrollo de potenciales en su grupo es amplio, ya que esta forma de trabajar:

· Amplía el espectro de actividades cotizadas en el aula.
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· Reconoce en todos los alumnos diversas fortalezas en áreas diferentes.
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· Fomenta la tolerancia y la atención a la diversidad dentro de la misma aula.
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· Permite enriquecer la metodología de trabajo con estrategias focalizadas más al desarrollo de procesos del pensamiento que sólo hacia la adquisición de datos.
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· Fortalece la autoestima de aquellos alumnos que por ciertas condiciones no son buenos en las cuestiones académicas establecidas en el grupo, pero que son buenos para la realización de otro tipo de actividades.
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· Fomenta la transferencia del conocimiento a otros contextos diferentes de aquél en donde fueron adquiridos.
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La capacitación es una estrategia que tiene que ir dirigida hacia el enriquecimiento de las prácticas educativas, y la visión del desarrollo de potenciales le da una dinámica interesante a estas acciones, ya que se pretende aprovechar las posibilidades de desarrollo de todos los niños y, si consideramos la estrechez actual de las habilidades académicas, enmarcaremos esta posibilidad en la necesidad de ampliar la visión del desarrollo intelectual que se tiene en la escuela.

 Los planteamientos hechos en este espacio no agotan esta temática; lo más importante es contemplar a la capacitación como una estrategia para elevar la calidad de la educación, y nuestra propuesta es hacerla considerando la visión del desarrollo de potenciales, ya que en nuestro país existen muchos niños y jóvenes en espera de una oportunidad para alcanzar el éxito. No sabemos cuántos Einstein o Da Vinci tenemos en nuestra aula, no podemos darnos el lujo de educar sin desarrollar habilidades del pensamiento, no consideramos a la educación sin la preocupación de proporcionar a los niños y jóvenes herramientas cognitivas y afectivas para desarrollar sus potenciales.

Bibliografía

ALONSO, J.A. y Y. BENITO, Superdotados: Adaptación escolar y social en secundaria, Narcea, Madrid, 1996.
BERCHÉ, J., citado en RAYO, L., Necesidades educativas del superdotado, EOS, Colección Fundamentos Psicopedagógicos, Madrid, 1997.
CASE, R., El desarrollo intelectual. Del nacimiento a la edad madura, Paidós, Col. Cognición y Desarrollo Humano, Barcelona, 1989.
CASILLAS, M.A., "El desarrollo de potenciales en la educación preescolar", en revista Renglones, Iteso, Guadalajara, diciembre de 1995 - marzo de 1996, pp. 17-21.
— "El desarrollo de potenciales como proceso para el trabajo con lo sobresaliente", ponencia realizada en el Primer Congreso Internacional sobre el Niño Superdotado y el Talento: Educando para el Futuro", Madrid, 1997.
Castanedo, C., "Características generales de los S. P. Bases psicopedagógicas en la educación especial", España, 1997.
Ideacción, Revista en español sobre superdotación, núm. 10, Valladolid, mayo de 1997.
Leontiev, A.N., "Sobre la formación de las capacidades", en Omar Trujillo (comp.), Selección de lecturas sobre la escuela histórico-cultural, tomo I, Depto. de Educación Especial, Guadalajara, 1995.

 


* Miguel Ángel Casillas: Encargado de la Dirección de Educación Especial, Secretaría de Educación Jalisco.


 

Artículo publicado en la revista Educar

Número 6 Estrategias Cognitivas

http://www.jalisco.gob.mx/srias/educacion/consulta/educar/dirrseed.html